La ONU define la violencia como «el uso intencional de la fuerza o el poder, en grado de amenaza o efectivo, contra uno mismo, otra persona, o un grupo o comunidad, que cause o tenga una alta probabilidad de causar lesiones, muerte, daño psicológico, trastornos del desarrollo o privaciones».  

Esta definición abarca diferentes tipos de violencia, incluyendo la física, psicológica, sexual, económica, digital, relacionada al género u orientación sexual y contra grupos más vulnerables como adultos mayores, niños y personas con discapacidad.  

En APC somos conscientes de que, al respetar y valorar las diferencias culturales, étnicas, de género y orientación sexual, entre otras, se fomenta la comprensión y tolerancia, lo que a su vez reduce los conflictos y situaciones violentas. Además, un entorno de trabajo inclusivo y diverso puede aumentar la productividad y la creatividad al permitir la participación de diversas perspectivas y habilidades. Asimismo, afianza todos sus compromisos de brindar un ambiente de trabajo seguro, saludable, libre de violencia y discriminación en su Política de Sostenibilidad y la Política de prevención de la violencia y promoción de la diversidad y equidad.